Cultivo de cebada

El cultivo de la cebada

El protagonista de nuestra entrada de hoy es, como no solemos verlo, una monocotiledónea. Se trata de la cebada (Hordeum vulgare) y está presente en nuestra cadena alimentaria y en una de las bebidas más históricas que forman aparte de la historia del hombre, la cerveza. No sólo eso si no que también tiene propiedades medicinales. Hoy, en Agromática, dejamos de lado el resto de plantas y hablamos de la cebada.

Una monocotiledónea protagonista, la cebada

No se puede negar la realidad, es el 5º cereal más cultivo del planeta con 53 millones de hectáreas. Sus orígenes datan de civilizaciones antiguas como la egipcia y se cree que tuvo su origen de la cebada silvestre, la cuál crecía en Oriente Medio.

Prácticamente se pueden dividir en 2 tipos de cebadas, la de 2 carreras y la de 6 y cada una tiene diferentes usos. Por ejemplo, la de 2 carreras, también conocida como tremesina se utiliza mejor para las industrias cerveceras.

Como muchos otros cereales, Hordeum vulgare pertenece a la familia de las gramíneas, también conocidas como poáceas, un grupo con más de 820 géneros y más de 12.000 especies descritas.

Y ahora ya, una vez que estamos introducidos en materia, es la hora de comentaros las características agronómicas de su cultivo.

cultivo de la cebada en el huerto

Exigencias climatológicas

Pocas, pocas, la verdad. Es un cultivo tan extendido que prácticamente está adaptado a cualquier ambiente. A partir de los 5-6 ºC ya es capaz de iniciar su germinación, y una vez que ha crecido, necesita entre 15 y 20 ºC para florecer y madurar. ¿Y las heladas? Pues tampoco pasa nada, ya que dadas las características fisiológicas de la cebada, soporta temperaturas de hasta 10 ºC bajo cero.

Las características del suelo

A la cebada le van bien los terrenos calizos, con buenas cantidades de cal y contenido medio entre arena y arcilla. Cuanto más suelto esté el terreno, con mejores condiciones se desarrollará la cebada, ya que en terrenos muy compactos, la germinación de esta gramínea se hace difícil. Al suelo normalmente se le suele dar un arado poco profundo, ya que no se requiere mucho volteo de suelo en profundidad debido a que sus raíces no son muy potentes. En resumen, suelos básicos, ligeros, sueltos y secos.

Dosis de abonado

Para conocer la dosis de abonado simplemente basta con conocer las cantidades minerales que extrae del suelo. Con ello, al reponerlos, estamos volviendo al estado inicial de la tierra, y siempre que no presente deficiencias, será suficiente para cultivar de nuevo. Esas cantidades para 1 hectárea son las siguientes:

abonado de la cebada

Hay que tener en cuenta que en el cultivo de la cebada, hay una época en la que mayores necesidades de abonado necesita, y es en la etapa que transcurre entre el encañado hasta la floración. Cuidado con pasarse con el nitrógeno, ya que en exceso puede provocar el encamado de la gramínea. El encamado, por si alguien no lo sabe, es la tendencia de un cultivo a inclinarse hacia el suelo.

Por otra parte, algunos autores ecológicos recomiendan incorporar al suelo por hectárea unos 45-50 kg de compost vegetal o estiércol animal y se suele hacer en el momento en el que se labra la tierra, para que se mezcle bien con la tierra.

Las necesidades de riego

Una de las particularidades del cultivo de la cebada es que necesita mayor cantidad de agua al principio que al final. Además tiene un coeficiente de evapotranspiración inferior al del trigo, por lo que en cada ciclo de cultivo se necesita menos agua. También hay que decir, ya que antes hemos mencionado que el nitrógeno en exceso favorece el encamado, es que el exceso de agua también. Es una paradoja como algo que se supone que haría aumentar el desarrollo y vigorosidad del cultivo, provoca que las gramíneas se inclinen hacia el suelo y adquieran porte rastrero. Sin embargo es así. Además, como hemos dicho antes, los terrenos con exceso de humedad no le favorecen a la cebada. Mejor sequía que inundación, por decirlo de alguna forma.

Los usos medicinales de la cebada

Aunque muchos de vosotros no lo sepáis, la cebada también tiene algunas propiedades medicinales, como las que os vamos a mencionar a continuación:

  • Propiedades digestivas
  • Propiedades antiespasmódicas
  • Propiedades antifebriles
  • Propiedades antiinflamatorias

Como es fibra, su consumo continuado combate el estreñimiento y ayuda a reducir la acumulación de líquidos en el cuerpo.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Ir arriba