Acer monspessulanum

Guía del arce de Montpellier (Acer monspessulanum)

El género Acer engloba alrededor de 160 especies de arces (aunque hay descritas alrededor de 700) bien distribuidos por el hemisferio Norte. Una de estas especies bien adaptada al clima mediterráneo español y que se extiende por países de similares condiciones climatológicas es el arce de Montpellier, cuyo nombre científico es Acer monspessulanum.

Aunque este arce es una especie asilvestrada, hay muchos casos donde se usa como planta ornamental para jardines grandes, especialmente cuando se busca un árbol de grandes dimensiones, caducifolio, para crear un manto de hojas anaranjadas en el otoño, con la caída de su follaje.

También tiene usos modernos adaptándose al cultivo de bonsái, dada la resistencia de su madera, su lento crecimiento y el tamaño de sus hojas.

Sea como fuere, en este artículo queremos contar las características más importantes del arce de Montepllier.

Características de Acer monspessulanum o Arce de Montpellier

Acer monspessulanum es un árbol caducifolio con un tamaño medio (comprendido entre 10 y 15 metros), que suele habitar bosques cálidos y se mezcla con otras especies propias de zonas calizas del mediterráneo.

Se considera un árbo medianamente longevo, con una supervivencia de hasta 100 años, crecimiento lento y con buenas características para rebrotar, especialmente en condiciones de buena iluminación.

  • Tronco: diámetro de entre 50-75 cm, corteza de color gris oscuro y tacto suave, que con el tiempo se va agrietando. La madera de sus ramas y troncos es considerada de alta calidad.
  • Hojas: de tipo trilobuladas (habitual en el género Acer), con un tamaño comprendido entre 3 y 6 cm, color verde intenso, textura ligeramente porosa. Caen con facilidad en otoño, cuando entran las bajas temperaturas (aproximadamente en noviembre).
  • Época de floración: florece de abril a junio, formando péndulos de 3 cm de color amarillo.
  • Frutos: disámaras (frutos planos que vuelan con facilidad) de 3 cm de tamaño, formado por 2 alas (di-sámara) del mismo tamaño.
Arce de Montpellier (Acer monspessulanum), Valdebebas (Madrid). Fuente: Fran Villegas Romero (El País).

Hábitat y geolocalización

Principalmente habita zonas cálidas en primavera y con cierto frío en invierno que garantice la caída temprana de sus hojas para una futura brotación primaveral. Suele encontrarse en el hemisferio norte (EEUU, zonas de Europa y este de Asia).

Acer monspessulanum se puede encontrar con relativa facilidad en los países mediterráneos de Europa (España, Portugal, Marruecos) y extendiéndose hacia el oeste de Asia (Turquía y Líbano), encontrando algunas poblaciones aisladas en el norte de Europa (Francia y Alemania).

En España, las principales poblaciones se ubican en el norte, con preferencia por la zona este.

Taxonomía

TipologíaClasificación
OrdenSapindales
FamiliaSapindaceae
GéneroAcer
EspecieAcer monspessulanum

Otras especies de Acer:

Condiciones de desarrollo de Acer monsperssulanum

Ubicación y climatología

Acer monsperssulanum está bien adaptado al clima mediterráneo, con cierta sequía estival y frío en invierno. Suele vivir en condiciones más aisladas en comparación con otros árboles del género Acer, ya que no suele formar agrupaciones, aunque crece de forma natural con otras especies de ecología similar, como encinas (Quercus ilex), quejigos (Quercus faginea).

Ubicación en el jardín: zonas aisladas, con buena ventilación y total disposición a la luz del Sol desde su trasplante.

Resistencia: alto rango de temperaturas y diferentes condiciones de humedad (preferencia por ambientes secos), así como alta resistencia a la sequía.

Altitud de desarrollo: desde el nivel del mar hasta los 1500 m de altitud.

Condiciones de suelo

Su hábitat natural son bosques de temperaturas cálidas y suelos de tipo calizo, con alta presencia en minerales como calcio y magnesio, que suben el pH a condiciones alcalinas (pH > 7,5, generalmente).

El arce de Montpellier puede desarrollarse en todo tipo de suelos, gracias a la gran resistencia y vigorosidad de sus raíces, incluso en zonas pedregosas, prefiriendo ambientes con buen drenaje y tendencia a suelo seco (como los arenosos o limosos) frente a suelos húmedos y encharcados (arcillosos).

Usos habituales del arce de Montpellier

Históricamente se ha utilizado la madera de este arce para carpintería, bien valorada por su color, de tipo rojizo, y por su resistencia. De hecho, es utilizado para fabricar objetos de pequeño tamaño, en ebanistería, así como instrumentos musicales.

Por otro lado, su buena aptitud para poda y su resistencia le permite ser adaptado a cultivo en bonsái, especialmente por el tamaño reducido de sus hojas y por el aspecto de la madera.

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