Nos tendríamos que ir a Sudáfrica para encontrar los orígenes de este variado género de flores con gran variedad de color. Afortunadamente, ya no tenemos que irnos hasta allí para conseguir Nemesias. Esta planta de floraciones de diversos colores y aspecto relativamente compacto, será una gran compañera de balcones terrazas e incluso exteriores en zonas templadas.
Flores hay muchas, eso lo sabemos. Afortunadamente, la biodiversidad nos permite tener miles de posibilidades vegetales, sea cual sea el clima, el suelo o las condiciones. Eso sí, debemos saber qué condiciones tenemos para intentar adaptar lo mejor posible las plantas que queramos sin llegar a frustaciones innecesarias que nos minen las ganas de jardinería.
Nemesia, una flor que nos dará mucho color un buen cacho de año
En este caso hablamos de una planta de un gran valor ornamental. La Nemesia strumosa tiene una amplísima variedad de colores, tanto monocromos como híbridos creadas por el hombre que combinan los colores de manera majestuosa. Tenemos colores blancos, amarillos, naranjas, rojas, moradas, rosáceas y a partir de ahí las combinaciones bitonales se multiplican como podemos ver en las siguientes fotos.
Esta gran variedad de color nos permite algo muy interesante: Combinaciones de color dentro de las mismas condiciones de cultivo
Teniendo en cuenta esto, los parterres, las jardineras, o los macetones mezclados con diferentes variedades que permitan esa gran variedad de color, son una opción muy a tener en cuenta para esta planta. El único inconveniente como veremos después es el riego.
Es una planta que difícilmente supera el medio metro de altura por lo que resulta de un tamaño medio muy comedido sin llegar a ser rastrero. Tiene presencia pero no se desmelena como otras. Pequeños grupos de Nemesia de diferentes coloraciones nos pueden dar colorido en un lugar de media sombra y fresco, situación que le irá muy bien como ahora veremos.
Condiciones de cultivo de Nemesia
Temperaturas e iluminación
Como bien decimos en la cabecera procede de África del sur pero la podemos encontrar en multitud de climas templados. No es una planta de extremos. Mas bien necesita estabilidad por las dos partes. No soporta nada bien las heladas así que en climas fríos, las opciones en exterior se reducen drásticamente. Nos quedan los interiores, las galerías o el exterior cuando las heladas hayan remitido, sabiendo que, cuando vuelvan los fríos, morirán irremediablemente.
Tampoco gusta de climas catalogados como calurosos, principalmente porque el aporte de agua que habría que aportarle sería demasiado, por lo tanto, se nos plantea el caso contrario en este tipo de climas. Cultivarla cuando el calor apriete un poco menos e intentar evitar la época estival.
Los climas denominados templados, de inviernos suaves y primaveras y veranos también suaves son perfectos para su cultivo en exterior. Aún así, lo mejor es ir probando situaciones resguardadas etc. hasta que encontremos la zona en la que se pueda adaptar mejor.
En cuanto a la iluminación puede crecer sin problemas a pleno sol (siempre y cuando no sea demasiado caluroso) o a media sombra. La segunda opción suele ser la más adecuada porque requiere un sustrato fresco y húmedo, situación que se mantendrá más estable con una exposición algo menor.
Suelo y riego
Como acabamos de mencionar, el suelo necesita tener un buen nivel de humedad, ser fresco, ligero y con muy buen contenido en materia orgánica. No podemos olvidar el compost o mantillo que debemos aportar antes de la plantación para asegurar una correcta nutrición de la planta. Aplicaciones posteriores ayudaran al desarrollo.
El riego resulta el apartado más importante. Sólo hay dos cosas que esta planta no soporta: las heladas y las sequías. Son sus dos factores limitantes. Recuperar la planta de una sequía resulta algo prácticamente imposible. Le afecta muchísimo y esta puede ser la razón por la cual, no sea una planta estrella en balcones, jardines y demás emplazamientos.
Hay que estar muy pendiente de aportar un ambiente fresco y un sustrato húmedo de forma casi constante.
Y mucho ojo con regar de forma abundante pensando que así tiene agua para varios días. Ya sabemos lo que pasa con los encharcamientos. Si eres capaz de estar pendiente con los riegos, ¡es la planta perfecta para tí!.
Poda de Nemesia: la clave para recuperar su floración
Una vez que la planta haya florecido, es muy posible que las sucesivas floraciones decaigan un poco. No hay como podarla un poco para darle ese empuje necesario para que reflorezca con ganas de nuevo. Se pueden ver floraciones en otoño y en invierno en algunas ocasiones con los cuidados apropiados.
NEMESIA STRUMOSA
Acabo de leer su texto que está muy bien estructurado, pero lamento que no se diga su distribución en España. Yo la he descubierto en la web de una gallega, pero yo vivo en Catalunya. Concretamente en Camprodon, es decir, el Pirineo Oriental.