Hoy hablamos de Fumaria officinalis, una planta que ha sido ampliamente usada durante siglos por sus diversos principios activos en medicina tradicional. Se encuentra distribuida por casi todo el mundo adaptada a multitud de climas y suelos gracias a su rusticidad. Es considerada hierba adventicia en muchos cultivos.
Características de Fumaria officinalis
Esta planta silvestre aparece en terrenos de llanura de secano por lo que en los cultivos de cereal es considerada como hierba adventicia y se elimina. En cultivos de regadío como remolacha suele crecer con asiduidad. Es una planta anual cuya inflorescencia morada en racimos durante la primavera es muy característica. Se conoce vulgarmente como Sangre de cristo, fumaria o palomilla.
Hablemos del género y de la especie
Empecemos por la especie
El apellido de Fumaria officinalis lo comparten muchas plantas. La denominación officinalis alude normalmente a su uso medicinal. En Wikipedia podemos encontrar el origen de esta palabra y por qué ha derivado al uso de ciertas especies de plantas.
Officinalis, u oficinal, es un epíteto latino medieval que denota especies —principalmente plantas— con usos en la medicina y la herbolaria. Se produce con frecuencia como un epíteto específico, segundo término de una nomenclatura binominal. La palabra officinalis literalmente significa «de o perteneciente a una officina», el almacén de un monasterio, donde se guardaban las medicinas y otras cosas necesarias. Officina era una contracción de opificina, de opifex (gen. opificis ) «trabajador, máquina, hacedor «(de opus «trabajo») + – fex , – ficis , «el que lo hace,» de facere «hacerlo, llevar a cabo». Cuando Linneo inventó el sistema binominal de nomenclatura, le dio el nombre específico «officinalis» , en el 1735 (primera edición) de su Systema Naturae, a las plantas (y a veces animales) con un medicamento establecido, culinario, o cualquier otro uso.
Fuente: Wikipedia
Fumaria officinalis. El género Fumaria
De todas las plantas que conforman el género Fumaria, Fumaria officinalis es su representante. Carlos Linneo la describió como la planta tipo de este género.
Como siempre decimos en este blog, la etimología de los nombres científicos de las especies vegetales nos dicen mucho y este es un caso claro. Etimológicamente, Fumaria viene de «Fumus»; humo. El color de las raíces y el olor recuerdan un poco a humo. Plinio el Viejo ya en la antigua Roma la describe aludiendo a que su jugo provoca cierta irritación en los ojos, como el humo.
Hábitat y distribución actual
Es una planta nativa de Europa pero actualmente es ominpresente ya que se introdujo en América y Asia. En España está ampliamente distribuida por todo el país con más presencia en la zona mediterránea. Donde menos presencia tiene es en la zona cantábrica y Galicia.
Usemos la base de datos GBIF para buscar las geolocalizaciones aportadas a nivel nacional de esta planta y corroboramos que efectivamente, los datos más numerosos se encuentran en la zona mediterránea.
Si no conoces GBIF, debes saber que es una base de datos sobre biodiversidad a nivel mundial. Cuenta con nodos en distintos países, entre ellos España. En estas bases de datos de biodiversidad se comparten datos sobre cualquier especie que se encuentre en cualquier parte del mundo. Es un proyecto colaborativo de código abierto y en el nodo español colaboran el Ministerio de Ciencia, el CSIC, el Real Jardín Botánico y otras instituciones mundiales. El portal principal de datos mundiales se llama GBIF.org
En el siguiente enlace podrás explorar el mapa con más detalle.
Principios activos y uso medicinal de la Fumaria officinalis
Contiene numerosos alcaloides, responsables en su mayoría de los efectos en el cuerpo humano, aprovechados en la medicina tradicional. Entre los alcaloides presentes el más abundante es la protopina. Sus características han sido estudiadas con efectos analgésicos y antihistamínicos. De hecho, la protopina es un compuesto del opio porque la familia de las Fumarias es Papaveraceae. En esta familia se encuentra el opio o las conocidas amapolas rojas.
Tradicionalmente se califica como planta usada en fitoterapia, con efectos de regulador biliar, espasmolítico, anticolinérgica, antiarrítmica y antibacteriana.
Existen estudios generalistas en los que se aislan los principios activos de varias plantas de medicina tradicional y Fumaria officinalis suele estar. Aún así ninguno de ellos precisan ni los efectos ni las dosis adecuadas. De hecho en sus conclusiones dejan las puertas abiertas a estudios más exhaustivos para determinar precisamente este tipo de información más profunda.
Un ejemplo es el siguiente estudio de 2009 en el que Fumaria officinalis destaca por ocupar el segundo puesto en compuestos fenólicos y su posible relación con la capacidad antioxidante. También se estudian compuestos con capacidad antimibrobiana. De los 32 microorganismos expuestos a los extractos de la planta sobrevivieron 21 Pero las conclusiones son claras y he aquí un pequeño resumen. «Las plantas estudiadas (entre ellas Fumaria officinalis) presentan distintos niveles de actividad antioxidante y antimicrobiana. Estos datos deben servir para futuras investigaciones. Además se deben evaluar los efectos de toxicidad de estos compuestos.
Hay muchos y si quieres investigar te recomiendo Google Académico para buscar referencias de estudios sobre Fumaria officinalis.