Cuando hablamos de Cyperus alternifolius, conocido como papiro de agua, paragüita, cipero, etc. Hoy en día su uso ha cambiado radicalmente a funciones ornamentales, cercanas a estanques o lechos de agua. Si te intriga conocer su cultivo, ¡adelante!
Clima y características de suelo para el cultivo de Cyperus alternifolius
Imaginaros que clima hace en Egipcio y hallaréis la respuesta en cuanto al clima que necesita. Aguanta mucho sol y altas temperaturas. Sin embargo es todo lo contrario en cuanto al frío.
Temperaturas por debajo de 10º C paralizan el crecimiento vegetativo de la Cyperus alternifolius, así que en invierno es necesario protegerla, ya sea disponerla en condiciones de interior o bien en el jardín protegerla con una cubierta vegetal de otras plantas.
Cuando las hojas se ponen de color amarillo es síntoma de afección por bajas temperaturas. La solución es realizar una poda desde los tallos y eliminar las hojas amarillentas del papiro de agua.
El abonado del Cyperus alternifolius
A pesar de su rusticidad y vivacidad necesita buena cantidad de materia orgánica, que se humedecerá con el riego de forma constante. Realiza un abonado constante en las épocas de mayor crecimiento (primavera y verano y salida del reposo invernal).
El riego de la paragüita, lo más importante
El riego es sin duda uno de los condicionantes más importantes en el cultivo de Cyperus alternifolius, ya que es una planta que acostumbra a crecer en zonas muy húmedas como bordes de estanques o ríos.
Tampoco es necesario tener un estanque para poder plantarla, pero sí que tienes que proporcionar una buena cantidad de riego y humedad constante en sus raíces.
Las raíces deben de estar en todo momento en contacto con la humedad del suelo, y en el momento que no sea así, la planta comenzará a adquirir tonalidades amarillas, sobre todo en las hojas.
Cyperus alternifolius es muy vivaz y de rápida expansión dentro de las plantas de jardín, y si obtiene las mejores condiciones de cultivo, que seguro que se las estás dando, su crecimiento será veloz y continuado.
A menudo necesitarás realizar una poda de mantenimiento.
Sin ninguna duda debes quitar hojas para reducir la densidad foliar y lo tendrás que hacer a finales de invierno (recuerda que esta planta es muy sensible al frío y las heladas).
Multiplicación y división de plantas
Se pueden hacer varios tipos de divisiones. Una de ellas es seleccionar un tallo joven y separarlo desde la base. Ese tallo lo dispondremos en otro lugar donde no le falte la humedad. También se puede escoger un tallo de entre 10-15 cm y esquejarlo en una maceta.