Tras haber vivido una situación tan inusual como el confinamiento obligatorio por la pandemia de 2020, los españoles hemos sufrido un pequeño cambio de mentalidad y ahora valoramos muy positivamente los espacios abiertos, el acceso a un jardín y la adquisición casas y terrenos rústicos.
Es por ello que en los últimos años hemos vivido una oleada de personas interesadas por la adquisición de terreno rústico donde aumente su contacto con la naturaleza y, también, le sirva para obtener una rentabilidad adicional.
En este artículo te contamos algunos detalles interesantes para aquellas personas que estén interesadas en la adquisición de terreno rústico y todos los pormenores que rodean a la compraventa de fincas rústicas.
¿Qué es lo que debo saber antes de comprar un terreno?
Conoce de primera mano la superficie de la finca
La mejor forma para comprobar con gran exactitud las medidas reales de un terreno rústico es mediante la medición pericial.
Sin embargo, si no tenemos acceso a la finca, el certificado del Catastro o un informe gratuito del SIGPAC nos ofrecerá una valoración bastante aproximada. Comprueba que los datos que encontramos se acercan a los que el vendedor ofrece en su anuncio.
Una vez compres y se haga el cambio de titularidad, la medición pericial será obligatoria.
Particularidades y concesiones de la finca
Según el uso que quieras darle a la finca, existen particularidades que es importante conocer antes de tomar la decisión de la compra. Si es para uso agrícola, el acceso al agua (concesión de riego) y la superficie total de riego es sumamente importante.
Otro punto negativo es la pendiente del terreno, ya que inclinaciones pronunciadas reducen la productividad de la finca y aumentan la velocidad de erosión del suelo.
Por último, el acceso a la finca es sumamente importante y es algo a tener en cuenta y puede condicionar enormemente la explotación del terreno, especialmente cuando hablamos de que se necesita el acceso de maquinaria pesada.
¿Cómo saber si una finca rústica es legal?
Otro punto sumamente importante es antes de comprar un terreno rústico es conocer cuál es su situación jurídica del para evitar problemas legales.
Para ello, es útil responder internamente a estas preguntas o solicitárselas al propietario, para aclarar cualquier duda:
- ¿El terreno rústico cuenta con construcciones declaradas y legalizadas desde el punto de vista urbanístico?
- ¿La finca está en medio de un camino, río o vía pecuaria?
- ¿Tiene el terreno rústico alguna carga?
- ¿Está la finca consorciada con Administración Pública?
- ¿Está actualmente la finca arrendada?
- ¿Los datos reflejados en el Catastro son los mismos del Registro?
Este último punto es importante para desligarse de cualquier problema legal a la hora de comprarlo, ya que con la compra se transfiere todo (incluido los problemas).
Por ello, una Nota Simple nos permite obtener mucha información antes de la compra, como:
- Titular de la finca
- Porcentaje de propiedad sobre la finca
- Existencia de usufructo
- Superficie de la finca
- Existencia de construcciones
Si el titular de la finca se niega a mostrarnos dicha información, lo mejor es que te retractes de la compra.
Problemas más frecuentes en la compra de una finca rústica
La compra de una finca rústica no está ligada a más o menos problema que una vivienda o terreno en suelo urbanizable. Simplemente son distintos.
Los consejos que te hemos dado en los puntos anteriores te reducirán al mínimo los problemas, y es que generalmente están relacionados con la omisión o transformación de la información para beneficio del vendedor.
Algunos de los problemas más frecuentes a la hora de comprar un terreno rústico son las siguientes:
- No coincide la información de superficie con SIGPAC
- Discrepancias entre la información del Registro y el Catastro.
- No están bien señalizados los lindes con los vecinos y existen disputas históricas.
- Existen construcciones o acceso al riego que no están declarados y, por tanto, no están legalizados.
- La finca posee lindes y servidumbres que generan molestias o impiden la plena explotación del terreno.
- No hay un estudio apropiado de la valoración fisca de la finca y se pagan más impuestos de los reales y obligatorios.