Llega el buen tiempo y las ganas de piscina. Solo hay una pega. El mundo se divide en quien tiene piscina y quien no. Si eres de estos últimos has de saber que en los últimos años han proliferado mucho piscinas desmontables de 5000-20.000 litros de agua en las que te puedes bañar y refrescarte en sin necesidad de sacrificar espacio de parcela para una de obra. ¿Tienen inconvenientes para el jardín? Vamos a verlo.
La piscina de obra no siempre es posible
Una piscina de obra es lo ideal pero no siempre es posible. Se sacrifica una buena porción de la parcela para siempre y requiere de un mantenimiento algo más costoso. Recuerda que como mínimo debes tener:
- Sistema de bombeo y dosificación de cloro y alguicidas
- Filtros
- Skimmer
- Limpiafondos…
El factor principal es el espacio. Si tenemos una pequeña parcela se inutiliza casi todo el espacio. Si es grande, importa menos, pero el presupuesto es elevado y dependiendo uso que se vaya a hacer de ella, la decisión de instalación va a estar ahí.
Opciones: Piscinas desmontables.
No sé en qué estarás pensando cuando se habla de piscinas desmontables. Vamos a poner dos extremos a modo de parodia para centrar el tiro. Estamos a medio camino entre una cosa y otra.
Las que más se están poniendo de moda son aquellas de lona con un volumen tal que ya requieren cierta estructura de contención por el empuje lateral del agua. Hablamos de piscinas de más de 2000-3000 litros llegando hasta tamaños de 25.000 o más. Ejemplos de varios tamaños podemos encontrar en Ferrokey.eu. Estas piscinas son lo suficientemente grandes para permitirte un remojón veraniego muy cómodo. Para los niños son una opción fabulosa y para los adultos tienen un tamaño más que suficiente. Las formas suelen ser con formato de bañera, cuadradas o redondas, pudiéndose adaptar según el modelo al espacio disponible.
¿Pueden afectar al césped del jardín?
Al hablar de estas piscinas, nos metemos en un terreno un tanto peculiar porque son desmontables, sí; pero no tanto. Una vez que las montas y las llenas las dejas toda la temporada. Tienen su propia bomba de depuradora (externa) para mantener la calidad del agua óptima para poder bañarse (cloro y alguicidas pricipalmente). Esta situación conlleva preguntarse si el césped va a sufrir. La respuesta corta es sí.
Peso
Las piscinas desmontables suelen tener entre 5000 y 25000 litros de agua. Esto supone la misma cantidad en kg en muy pocos metros cuadrados. Sin embargo vamos a hacer un pequeño cálculo de andar por casa. Una piscina de estas suele tener un metro de altura o como mucho 1,20 metros. En una piscina de 20000 litros, estamos asumiendo entonces que la superficie que ocupa es de aproximadamente 20 metros cuadrados. Si lo pensamos bien estamos ejerciendo 1000 kg de fuerza sobre 1m2 de jardín.
Ahora pensemos en una persona adulta. Supongamos para redondear que pesa 75kg. La superficie de apoyo son sus pies que no van a tener más de 300cm2. Esto pasado a metros cuadrados es de 0,03m2. Con una sencilla regla de tres, la fuerza o presión que estamos ejerciendo de pie sobre el césped al pisar en estático supera con creces la de la piscina por unidad de superficie. El resultado de esta sencilla cuenta es de 2500kg/m2. Eso son dos veces y media más que la piscina.
Todo esto sin contar con que correr, andar y saltar suponen una fuerza extra que en estático porque tenemos que sumar además de la inevitable gravedad, el desgarro al traccionar y la fuerza extra por nuestro músculo al presionar.
Conclusión: El peso en sí no es un problema.
Falta de luz
En realidad, lo que sí va a ser un problema es la falta de luz. Entre 2 y 4 meses de oscuridad total en la zona donde apoya la piscina supone amarilleamiento y muerte de mucha brizna de césped. Es imposible que haga la fotosíntesis y que oxigene correctamente. y no son piscinas que se puedan mover de un sitio a otro.
¿El agua clorada de la piscina puede afectar al césped?
No hemos puesto nada de si el agua clorada pudiera dañar o quemar el césped del jardín. No lo va a hacer. Si los niveles de cloro son los normales, el suelo y el césped toleran los aditivos químicos que se añaden en una piscina. No te preocupes en absoluto por las salpicaduras, derrames, fugas etc. Las concentraciones de cloro son muy bajas como para afectar a los cultivos, sea césped o cualquier otra planta ornamental, incluyendo las sensibles.
¿Y se puede regar?
El cloro va reaccionando poco a poco y se va perdiendo en la solución de la piscina. Es lo que conocemos como cloro residual. Pasa lo mismo con las plantas potabilizadoras de agua. Las concentraciones de cloro que se añaden aguas arriba no son las que nos llegan al grifo de casa. De tal forma, podríamos llegar a regar con esta agua, cuando los niveles de cloro sean bajos.
La única precaución a tener en cuenta son las plantas pequeñas, recién germinadas o especialmente sensibles.
En particular, los parámetros de calidad de agua de una piscina en cuanto a pH, cloro libre, temperatura, conductividad, dureza etc son perfectamente compatibles con el riego. El cloro libre en una piscina ronda como máximo los 2 o 2,5ppm (mg/l). Una planta sensible puede soportar concentraciones de 30ppm, muy por encima de los valores de piscina.
Atención: Si el tratamiento de tu piscina se basa en agua con sal a razón de 5-6g/l entonces esta agua no es en absoluto apta para el riego. Aquí sí habremos de tener cuidado.
¿Qué especies de césped que pueden soportar mejor las piscinas desmontables grandes?
Teniendo en cuenta todo lo anterior, la única variable que debemos tener en cuenta es el peso y la falta de luz por estar tapado durante varias semanas. La falta de luz no la vamos a poder solucionar pero la variable peso sí podemos paliarla con especies resistentes al pisoteo. Hay especies como Ray grass (Lolium perenne) o el Cynodon dactylon con más resistencia aún por al dureza de sus hojas. Po último no podemos olvidarnos de la Festuca arundinacea, el más versátil en cuanto a clima, y resistencia a la pisada.
Nunca descartes el césped artificial
Sin embargo, si sabemos que las piscinas para el verano desmontables van a ser un constante todos los años, el césped artificial puede ser una de las soluciones más económicas a largo plazo y con menos problemas. No va a sufrir con el peso, no le afecta la falta de luz ni sufre con las pisadas. Es cierto que le quitamos ese aspecto natural al césped pero siempre puedes plantearte una zona concreta donde vaya la piscina. Las calidades actuales del césped artificial son verdaderamente sorprendentes en los últimos años.